Aragonés de nacimiento, este escritor y pintor, cursó estudios en Italia, país que recorrió y plasmó en muchas de sus obras. Fue miembro de la Real Academia de San Fernando y de la Real Academia de la Historia. En su faceta pictórica cultivó el retrato, donde se refleja su preocupación por el acabado y el detalle, en la línea neoclasicista. De esta preocupación por el retrato nace su principal obra, “Iconografía Española” (1855-1864): colección de dibujos de personales ilustres de España de todas las épocas.
“Muralla de Ávila” (h.1850). Valentín Carderera. Lápiz y aguada de tinta. Fundación Lázaro Galdiano.
“Plaza de San Pedro de Ávila) (h.1850). Valentín Carderera. Lápiz y aguada de color. Fundación Lázaro Galdiano.